El Método Socrático es una forma de enseñanza que se basa en el diálogo entre el maestro y el alumno. Esta técnica se centra en la discusión de preguntas y respuestas para ayudar al alumno a llegar a sus propias conclusiones. Así, el objetivo del Método Socrático es, en consecuencia, estimular el pensamiento crítico, la reflexión, y promover el aprendizaje independiente.
Si se utiliza correctamente, el Método Socrático puede ayudar a promover el pensamiento crítico, a desarrollar el conocimiento y a fomentar las habilidades de resolución de problemas en los niños. Y es que el llamado Método Socrático se aleja de la instrucción y adopta un enfoque más conversacional de enseñanza, por lo que, mediante el diálogo y las preguntas, los padres pueden dar a sus hijos la oportunidad de reflexionar y de expresar sus ideas y opiniones.
Esto puede ser especialmente útil cuando se abordan temas complejos, como la moral, o cuando se fomenta una comprensión más profunda de la materia. Y por si fuera poco, además de facilitar el intercambio de ideas y la comprensión de diferentes perspectivas, el Método Socrático puede ayudar a los niños a formarse respuestas a preguntas de manera independiente, validando así sus propias ideas.
¿De dónde proviene el Método Socrático?
El Método Socrático proviene del filósofo griego Sócrates, que ya lo usaba para profundizar en la opinión de sus alumnos mediante el cuestionamiento. Esto permitía exponer las contradicciones y alentar a las personas a cuestionar lo que les decían, mirando más allá de lo obvio.
Hoy en día, el Método Socrático se sigue usando ampliamente en la educación médica y legal para ayudar a los estudiantes a comprender conceptos y principios más complejos, por lo que sigue siendo muy importante. Pero también existen varias formas en las que los profesores pueden cuestionar a sus alumnos bajo el Método Socrático, generalmente ubicadas en los extremos opuestos de un espectro.
Sea como sea, lo que está claro a día de hoy es que esta técnica de enseñanza ha demostrado ser una herramienta eficaz para ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades críticas y a profundizar en el conocimiento en muy diferentes ámbitos, por lo que la debemos conocer.
La educación y el Método Socrático
El Método Socrático ha jugado un papel importante en el campo de la educación desde hace muchos siglos, y por ello es considerado por muchos la mayor aportación filosófica de Sócrates al mundo. Dicho método se sustenta en la idea de que el conocimiento se adquiere mediante el diálogo y el cuestionamiento, y algunos de sus principios básicos se centran en retar al estudiante al autoanálisis y la discusión para así promover el pensamiento reflexivo.
Durante el proceso, se puede comprender mejor la materia y desarrollar las propias opiniones, pero Sócrates también animaba a la gente a cuestionar lo que se les decía y a mirar más allá de lo evidente, favoreciendo la motivación y el pensamiento crítico. Esto quiere decir que, a través del Método Socrático, los estudiantes pueden desarrollar la capacidad de cuestionar la idea aceptada comúnmente, lo que les inducirá a pensar de manera crítica sobre cualquier situación, haciéndoles más conscientes de sus decisiones.
En definitiva, esta filosofía educativa es un camino colaborativo en el que el educador se limita a ser un “facilitador”, es decir, en alguien capaz de ayudar al estudiante a desarrollar su propio criterio de la mejor manera.
La ironía y la mayéutica en el método Socrático
La ironía y la mayéutica son dos herramientas fundamentales del Método Socrático que ayudan a los estudiantes a pensar de forma crítica y a llegar a sus propias conclusiones, pero veámoslo con más detalle:
- La ironía
La ironía es una forma de hablar en la que se dice una cosa, pero se quiere decir otra. Por ejemplo, un maestro puede decir a un estudiante: “¡Eres muy inteligente!” cuando en realidad quiere decir que el estudiante no ha entendido nada del tema.
En lugar de dar sus propias respuestas, Sócrates utilizaba la ironía para llevar a los alumnos en una dirección que les hiciera descubrir sus propias respuestas, respuestas que antes les estaban ocultas.
El cuestionar la sabiduría convencional permitía a Sócrates llegar a la raíz de cuestiones complejas y propiciar un debate y una discusión en profundidad.
- La mayéutica
La mayéutica es una técnica de preguntas y respuestas que Sócrates usaba para ayudar a sus estudiantes a descubrir la verdad. Esta técnica se basa en el principio de que la verdad está dentro de cada uno de nosotros, y que el maestro debe ayudar al estudiante a encontrarla.
La forma de hacerlo, por su parte, es cuestionando las respuestas hasta encontrar una contradicción para poder llegar al conocimiento real. Esta técnica se veía similar al proceso del parto, en el sentido de que Sócrates la utilizaba para ayudar a los estudiantes a dar “a luz” sus propias ideas, guiándoles a través del proceso de llegar a la conclusión por sí mismos.
Sócrates comprendió que era nuestra alma eterna la que guardaba todas las ideas dentro de las personas y que las respuestas se podían encontrar allí, por lo que su método simplemente buscó algunas herramientas para conseguir hallarlas. ¿No es fabuloso? ¿Habías oído hablar ya de este método?
