Hoy, más que nunca, vivimos en un mundo que requiere que las personas cuenten con un pensamiento crítico robusto, una habilidad muy importante para la vida que igualmente precisan los niños. Es por esto, y por muchas otras razones más, por las que hoy debemos conocer y hablar sobre cuáles son las pautas para desarrollar el pensamiento crítico de los niños.
Los seres humanos nos encontramos inmersos en una época en la que la tecnología nos desborda y bombardea de información constantemente, y dichos avances tecnológicos (aunque también traen muchas cosas buenas) hacen que las personas, y especialmente los niños, tengan que adaptarse y necesiten crear su propia información al respecto.
Pero, ¿cómo podemos desarrollar ese pensamiento crítico? Aunque no existe una manera en particular o específica de ayudar a un niño a que desarrolle su capacidad para fomentar el pensamiento crítico, lo cierto es que sí que existen determinadas pautas que pueden servir de guía favorablemente.
¡Veamos cuáles son!
Pensamiento crítico, ¿qué es exactamente?
Aunque existen muchos conceptos o definiciones sobre lo que es o no es el pensamiento crítico, se podría decir que no es más que la acción de pensar con la finalidad de formarse una opinión propia acerca de algo en específico. Además, también es el deseo de buscar una posición o la acción de meditar acerca de un hecho en particular de la vida cotidiana.
Del mismo modo, se puede llegar a pensar que el pensamiento crítico simplemente nos ayuda a establecer una opinión entre una diversidad de pensamientos y argumentos, y eso precisamente nos permite ser dueños de nuestros propios pensamientos basados en la razón.
A su vez, cuando los niños desarrollan y cultivan la habilidad del pensamiento crítico, pueden ser capaces de:
- Desarrollar la intuición.
- Establecer conexiones entre diversas ideas.
- Ser capaces de reconocer y analizar gracias a la construcción de argumentos sólidos.
- Pueden reflexionar bajo su propio pensamiento.
Cómo podemos desarrollar el pensamiento crítico de los niños
Afortunadamente, existen algunas pautas o directrices que podemos aplicar con la intención de hacer que nuestros hijos empiecen a desarrollar su pensamiento crítico cuanto antes, para lo que podemos realizar lo siguiente:
Haz preguntas abiertas y motivadoras
La mejor manera de comenzar a desarrollar en los más pequeños ese espíritu de pensamiento y de análisis, es la de contestar con otra pregunta cuando ellos nos lancen alguna interrogativa. También podemos hacerles una pregunta que les motive a pensar de una manera razonable y crítica, lo que hará que, a medida que vaya pasando el tiempo, vaya formando también su capacidad de razonamiento.
Cuando haya un problema, deja que encuentren la solución
Si tu hijos tienen un problema (que no sea grave, claro está) evita darles la solución y espera a que ellos pongan a funcionar su pensamiento en busca de la mejor manera de encontrar una solución. Esto es algo que les permitirá desarrollar todo su potencial en cuanto a la solución de problemas, así como su nivel de lógica y razonamiento.
Si ves que aun así se les hace muy difícil el tomar una decisión al respecto, podrás sugerirles una posible solución. Pero recuerda que esto no es algo que ellos aprendan de forma rápida, por lo que será necesaria la paciencia mientras vayan desarrollando su capacidad de pensar de manera crítica e individual.
Ayúdales a encontrar diversas soluciones
No se trata de solucionar los inconvenientes o problemas que pueden llegar a tener, sino de que, como padres, podamos ayudar a los hijos a vislumbrar algunas posibles soluciones a los mismos dando determinadas herramientas para ello. De esta manera, los niños podrán desarrollar de una forma más favorable y tranquila su capacidad de pensamiento.
Bríndales la oportunidad de jugar y echar a volar su imaginación
Recuerda que los niños siguen siendo niños y que, aunque deban desarrollarse y crecer, también deben tener sus momentos de diversión y de esparcimiento. Además, cuando se encuentren jugando, también tendrán grandes oportunidades de resolver problemas y de analizar situaciones, sobre todo en los juegos de simulación.
No presiones, concede el tiempo suficiente para pensar
A veces como padres queremos realizar todo de manera apresurada, y eso puede repercutir de manera negativa en los más pequeños. Por eso lo más recomendable es que, cuando les hagamos una pregunta, les concedamos también el tiempo suficiente como para que puedan pensar con detalle lo que harán o lo que nos responderán.
Plantear y resolver hipótesis
Por último, es importante señalar que las hipótesis también juegan un importante papel a la hora de desarrollar el pensamiento crítico. Así, para entender mejor en qué consiste, trata de hacerles preguntas sencillas, pero que les inviten a analizar y a pensar en las diversas opciones que puede llegar a tener una determinada situación. Un ejemplo claro sería: ¿Qué pasaría si….? Los juegos de detectives o de misterio, tipo “Cluedo” o “Escape Room” pueden ser excelentes herramientas para ello.
Poco a poco, con el paso del tiempo, los niños comenzarán a desarrollar su habilidad para pensar y analizar las diversas situaciones de la vida, pero no olvidemos en este punto que, como padres, también disponemos de herramientas útiles y pautas para favorecer ese pensamiento crítico de los niños. ¡Usémoslas sabiamente!
