Las técnicas educativas que se emplean comúnmente en el aula de clase no logran cubrir las expectativas del 100% del alumnado. Esta consideración es perfectamente válida, sobre todo cuando toca analizar a una población estudiantil diversa.
En consecuencia, no siempre las estrategias que utiliza el educador puede que lleguen con gran facilidad a todos. Por eso, la constante revisión e incorporación de nuevos modelos educativos por parte de los gobiernos e instituciones, es totalmente imprescindible y necesaria.
La buena noticia es que existen técnicas para salir airoso del aula, y se centran en encontrar el camino para abordar los objetivos establecidos en el programa de estudio y alcanzar el aprendizaje de la totalidad de los estudiantes. Para alcanzarlo, además de la motivación tanto del alumno como del docente, es imprescindible un conjunto de estrategias como las que veremos a continuación.
Técnicas educativas para utilizar en el aula con éxito
- Aprendizaje activo
Con el aprendizaje activo se busca potenciar las habilidades de búsqueda, análisis y síntesis de la información, promoviendo de esta manera una constante reflexión por parte del estudiante, encaminada a fortalecer el aprendizaje particular.
- Enfoque constructivista, aprendizaje propio
Aplicar el enfoque constructivista de la psicología al aprendizaje, lleva a alcanzar un aprendizaje auténtico. Generalmente, este enfoque se emplea para estimular el conocimiento del estudiante contrastando la información vieja con la nueva en clase, y de esta manera adaptar el nuevo conocimiento a su propia realidad o necesidad.
- Aprendizaje colaborativo
El aprendizaje colaborativo sienta sus bases en el aprendizaje basado en problemas, donde se hace necesario observar el entorno para plantear posibles soluciones y compartirlas con los compañeros. Se caracteriza por estar conformado por un número determinado de estudiantes que a su vez trabajan en conjunto para encontrar alternativas posibles, creando una sinergia adecuada en torno a un determinado tema.
- Aprendizaje flexible
El aprendizaje flexible comienza cuando se le abre paso a la informalidad, es decir, es el tipo de aprendizaje invisible que se adquiere haciendo una labor. Este tipo de aprendizaje aparece con la intención de ofrecer una opción alterna a la tradicional. En este caso es el estudiante quien decide cuándo, cómo y dónde aprender, siendo una de las formas de aprendizaje favorable para la adaptación a los nuevos tiempos, especialmente a las realidades que enfrentamos.
- Aprendizaje para el servicio
El aprendizaje debe estar al servicio de quien lo necesite, y de esta manera se vincula al enfoque global de la educación. Aplicar este modelo implica la práctica coherente de principios y valores necesarios para alcanzar el bien común. En pocas palabras, es un tipo de aprendizaje a través de proyectos enfocados en la contribución social y puestos al servicio de la comunidad.
En definitiva, debemos saber que las técnicas educativas deben ir de la mano de técnicas de enseñanza como parte de las herramientas de aprendizaje y de las estrategias del docente. De manera que, el autoaprendizaje, la técnica del aula invertida, la “ludificación” o aplicación de juegos en el aprendizaje, el método del caso, la retroalimentación, los debates o las redes sociales, entre otros, deben acompañar el proceso para potenciar tanto el desarrollo intelectual como las habilidades de resolución de problemas.
