Muchos niños terminan la escuela aún con un vocabulario inadecuado o insuficiente para su edad, y esto debería hacernos reflexionar con respecto a si estamos trabajando en ello correctamente. Afortunadamente, ayudar a los niños a mejorar y a trabajar su vocabulario es sencillo y posible no solo en la escuela, sino también en casa, y puede conseguirse siguiendo una serie de recomendaciones de las que hablaremos a continuación.
Debemos tener en cuenta que si un vocabulario es demasiado limitado o insuficiente, dicha falta puede acarrear serios problemas de aprendizaje y de comprensión y comunicación en el futuro, por lo que sería bueno atajar el problema a tiempo. Y es que el vocabulario es importante por muchas razones y, entre ellas, que los niños necesitan comprender una amplia gama de palabras para tener éxito en la lectura y en su desarrollo escolar. Y no solo en el aula es importante el vocabulario, porque lo cierto es que las palabras capacitan a los niños para dar sentido a todo el mundo que les rodea, por lo que un amplio vocabulario puede ser necesario para que puedan aprender a expresar sus emociones con palabras, a socializar con las personas, a imaginar o a soñar sin límites.
Cómo podemos ayudar a mejorar el vocabulario de los peques
- Habla mucho y con corrección
Los niños pequeños son como esponjas, por lo que es importante sumergirlos en el lenguaje desde el principio. Además, la cantidad de palabras que los niños aprenden en los primeros años está estrechamente relacionada con su éxito futuro. Al mismo tiempo, la calidad de las relaciones e interacciones existentes entre padres e hijos también es uno de los factores más importantes que pueden influir en el vocabulario, por lo que es vital hablar con los niños siempre con corrección, mostrándoles diferentes palabras (sin infantilizarlas) aunque aún no las entiendan. Los niños siempre tienen un vocabulario receptivo más amplio que el vocabulario expresivo, es decir, que entienden más palabras de las que pueden usar. Esto significa que no hay necesidad de simplificar demasiado la forma en la que se habla con los niños. Intenta en casa nombrar objetos, usar palabras numéricas o introducir aquellas que expliquen las emociones… ¡Cuántas más palabras entiendan más podrán usar!
- Leed algunos ratitos juntos
Una de las claves más importantes para tener un vocabulario amplio es inculcar el amor por la lectura, por lo que es vital conseguir que sea una rutina, con un espacio y/o un momento concreto en el que practicar todos los días. Pero no recurras solo a los libros escolares y busca intereses en tus peques para poder encontrarles libros interesantes que se relacionen con ellos, pues esto les alentará a leer por puro placer cada vez más. No te olvides de leer en voz alta a tus hijos, incluso cuando ya sean capaces de hacerlo por sí mismos. No olvides que a los niños les encanta escuchar historias, y tú puedes desarrollar su vocabulario eligiendo libros o inventando historias que aún sean demasiado difíciles para poder elegir de manera voluntaria. Hablar también sobre lo que se está leyendo ayudará a aumentar el nivel de comprensión de los más pequeños y su nivel de vocabulario.
- Usa etiquetas adhesivas por la casa
Usa notas adhesivas para etiquetar objetos alrededor de la casa, pues esto ayudará a los niños a aprender a leer palabras nuevas con mayor facilidad. A medida que crezcan, podrás agregar adjetivos a las etiquetas, como “mesa de madera”, para ampliar aún más su nivel de vocabulario.
- Juega a sencillos juegos de palabras
Existen una gran variedad de juegos de palabras que pueden ayudar a los niños a aprender nuevas palabras. Y es que hacer que el aprendizaje del lenguaje y de las palabras sea parte de un juego es realmente útil, pues lo hace interactivo, divertido y mucho más interesante para los más pequeños.
- Usa palabras nuevas en oraciones
No tiene sentido que un niño aprenda nuevas palabras si no sabe cómo usarlas, por eso, hacer que usen una palabra en una oración hablada o escrita les ayudará a comprender su significado y contexto. En algún horario de tareas o rato libre, pide a los peques (según su nivel) que escriban una oración que incluya cada palabra nueva que se te ocurra, una vez explicada, y anímales a buscarla en el diccionario si aun así no están seguros de su significado. Saber cómo usar un diccionario de sinónimos aumentará el vocabulario de los peques y mejorará la calidad de su trabajo escrito, así que muéstrales cómo usarlo y anímales a tenerlo a mano cuando estén escribiendo. También puedes probar a introducir una palabra nueva cada día y así… ¡aumentarás su vocabulario en 365 palabras cada año!
- Enseña a escribir por placer
A veces a los niños se les impide escribir por placer, generalmente, al pretender que escriban siempre sobre cosas que no les interesan en la escuela. Puedes intentar contrarrestar esto alentando a tus peques a escribir por placer sobre cualquier tema que les entusiasme. Eso sí, no corrijas su escritura, ya que se trata de que aprendan primero a disfrutar del ejercicio de escribir. Se cree que los niños que disfrutan de la escritura tienen siete veces más probabilidades de escribir a un nivel adecuado para su edad conforme pasa el tiempo.
- Crea un muro o álbum de palabras
Esta es una excelente manera de ayudar a que nuevas palabras viajen por el cerebro de un niño. Escribe cada palabra nueva que aprendan en una tira de papel y pégala en la pared de su habitación en un bonito muro de palabras. Si no deseas hacer esto en la pared, siempre puedes crear álbumes artesanos o cuadernos bonitos en los que se pueda realizar el mismo tipo de actividad.
El refuerzo positivo ayuda a los niños a aprender, así que crea un ambiente donde el vocabulario sea algo prioritario y de verdadera relevancia en vuestro día a día. Cuanto más agradable sea la experiencia de aprender vocabulario, más preparados estarán los niños para aprenderlo.
