El Test de Teberosky fue diseñado por Ana Teberosky para medir las capacidades cognitivas, lingüísticas y motoras de los niños, proporcionando a los docentes y a los padres una valiosa información sobre el desarrollo de los mismos.
Que los niños aprendan a leer y a escribir es uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan los docentes a diario, pero para tener éxito en este propósito hay que hacer que los niños desarrollen las habilidades que les permitan lograrlo. Para ello, los docentes suelen recurrir a diferentes estrategias y métodos, y la llamada “prueba Teberosky” es uno de esos métodos de evaluación que permiten medir el avance de los niños en el aprendizaje de la lectura y de la escritura.
Los resultados de la prueba Teberosky permiten a los profesores y padres identificar los aspectos en los que los niños necesitan mejorar para lograr un mejor desempeño en la lectura y la escritura, y es una prueba que se aplica de forma individual y que se compone de una serie de preguntas y de ejercicios.
El Test de Teberosky puede utilizarse para diagnosticar problemas de aprendizaje e identificar y proporcionar orientación para la planificación educativa y profesional, pero veamos un poco más en qué consiste y cuáles son sus etapas principales.
¿Quién es Ana Teberosky?
Ana Teberosky es una psicóloga infantil, pedagoga y escritora argentina nacida en 1943, que se ha convertido en una de las principales expertas del mundo sobre el desarrollo psicológico infantil y en temas sobre la enseñanza, la lectura y la escritura.
Ha sido autora de más de 30 libros sobre el tema, muchos de los cuales se han convertido en materiales educativos ampliamente reconocidos por maestros, padres y estudiantes. Teberosky, junto a la Dra. Emilia Ferreiro, ha contribuido a la compresión del proceso evolutivo para la adquisición del lenguaje escrito, lo cual es muy importante y debemos destacar.
Además, durante sus años de profesora e investigadora, Ana Teberosky ha sido ampliamente respetada por su trabajo académico impecable y por su énfasis en la participación activa y constructiva. Pero para poder realizar esta prueba debemos conocer primero cuáles son las etapas que existen en la escritura infantil.
Etapas de la escritura infantil
Aprender a leer y escribir es un proceso que se desarrolla gradualmente en los niños. Se realiza a través de etapas que permiten a los docentes determinar el nivel de comprensión de los peques al inicio del ciclo escolar y cuánto han avanzado de una semana a otra.
Comprender este sistema de evaluación es fundamental para los docentes, ya que les ayuda a medir el progreso de sus estudiantes y les permite también el ofrecer a los estudiantes una educación de calidad, así como asegurar que están recibiendo la mejor formación posible.
Así, y de acuerdo con las doctoras Ana Teberosky y Emilia Ferreiro, la escritura infantil pasa por varias etapas:
Etapa de escritura indiferenciada
Esta es una fase de desarrollo en la que los niños comienzan a dar forma a sus ideas por primera vez. En este momento el proceso no contiene reglas que rigen lo correcto o lo incorrecto al escribir. Los niños experimentan con garabatos y símbolos para expresar sus pensamientos y emociones sin preocuparse por el significado real de lo que hacen.
Etapa de escritura diferenciada
Esta es una etapa de imitación, donde los niños comienzan a imitar lo que ven, pero donde todavía no tienen una conciencia real de qué es lo que hacen o qué significa.
Etapa silábica
Es en esta etapa cuando, de acuerdo con Ana Teberosky y Emilia Ferreiro, los niños empiezan a prestar atención y a decodificar las palabras en sílabas. Esta etapa, a veces llamada etapa fonológica, ocurre antes de que los niños tengan un completo entendimiento del vocabulario y su significado se caracteriza por la manipulación de sonidos dentro de un marco silábico.
Etapa silábica – alfabética
Durante esta etapa los niños son capaces de reconocer y formar sílabas en palabras simples, componerlas y manipularlas para crear formas significativas y completas. Dentro de este estadio destacan el vínculo entre el sonido y la letra.
Etapa alfabética
En esta etapa el niño ya ha adquirido destrezas previas, tales como saber asociar palabras con objetos o reconocer algunas letras del abecedario a partir del juego, y ahora puede empezar a comprender qué significan las letras individualmente y comenzar a formarse un concepto sobre ellas para luego nombrarlas. Esta etapa es fundamental para que posteriormente el niño pueda descifrar palabras sin necesidad de contar sílabas.
Óscar Amaya y la última etapa agregada
Sin embargo, para el psicopedagogo argentino Óscar Amaya, el proceso aún no estaba completo con las etapas anteriores, porque consideraba que le faltaba el elemento de la comprensión del alfabeto, motivo por el que agregó una última etapa:
Etapa ortográfica
Esta etapa se caracteriza por el dominio básico de habilidades como el reconocimiento o la realización correcta de letras, sílabas y espacios entre palabras. Los niños también emplean herramientas visuales para comparar la forma escrita con su pronunciación, relacionando así distintos sonidos con grafemas. Durante esta etapa aprenden reglas gramaticales sencillas sobre división silábica o el uso correcto de mayúsculas y minúsculas.
¿Conocías ya el test Teberosky? ¿Lo has aplicado ya?
