Seguro que has oído hablar de ello, pero… ¿sabes realmente lo que es el cambio climático y cómo nos afecta? El cambio climático, también conocido como “calentamiento global”, es la forma en que los actos ajenos a la naturaleza, como por ejemplo la mano del hombre, afectan en el calentamiento y en el clima de nuestro planeta.
El clima es cíclico y cambiante de manera natural, pero lo normal es que dichos cambios tarden mucho en producirse y que todos los seres humanos habitemos en un clima determinado durante toda nuestra vida. O al menos eso era así hasta hace poco, porque los efectos del cambio climático son ya tan extremos que son visibles y evidentes para todos nosotros. Se estima que, al menos desde la Revolución Industrial, surgida en el siglo XIX, la forma de trabajar y de vivir de los humanos ha sido muy contaminante y agresiva con el medio ambiente, por lo que la Tierra ha ido subiendo su temperatura más rápido de lo que debería, afectando a las personas, al clima y a la fauna y la flora, como ocurre con los osos polares. Estos osos tan encantadores necesitan hielo marino para poder cazar, criar a sus crías, para descansar…pero su hábitat natural helado se está derritiendo por las temperaturas más cálidas de la Tierra y su vida se está poniendo tristemente en riesgo.
Toda esta actividad llevada a cabo por las personas libera una gran cantidad de gases nocivos a la atmósfera de la Tierra, lo que hace que la temperatura global aumente a gran velocidad. A medida que sube la temperatura del planeta, los climas pueden alterarse y volverse húmedos cuando no lo eran, volverse cálidos cuando antes eran polares…es decir, que el cima se vuelve cada vez más extremo y difícil de predecir.
Algunas cosas que influyen en el cambio climático
- La agricultura. Aunque parezca casi imposible, la actividad agrícola también influye, y bastante, en el cambio climático. Por ejemplo, la alimentación de las vacas hace que tras su digestión se liberen gases muy perjudiciales para la atmósfera en grandes cantidades. Lo crea o no, los hábitos alimentarios de las vacas contribuyen al cambio climático. Al igual que nosotros, cuando las vacas comen, el metano (un tipo de gas de efecto invernadero), se acumula en su sistema digestivo y se libera en forma de gases, por lo que…¿te imaginas a 500 millones de vacas liberando todos esos gases horrorosos a la atmósfera cada día?
- Los combustibles fósiles. Durante los últimos 150 años, los países industrializados han quemado grandes cantidades de combustibles fósiles, como petróleo y gas. Dichos gases liberados a la atmósfera actúan como una “manta” invisible que atrapa el calor del sol y calienta la Tierra. Esto es lo que se conoce como “efecto invernadero”.
- La deforestación. Los bosques absorben grandes cantidades de dióxido de carbono del aire y liberan oxígeno en él, otro gas de efecto invernadero. Afortunadamente la selva amazónica es tan grande y eficiente en esta tarea que actúa como el aire acondicionado de nuestro planeta, lo que limita bastante el cambio climático. La mala noticia es que se están talando muchas selvas tropicales para producir madera, aceite de palma o para hacer carreteras, edificios, extracciones de petróleo…lo que está repercutiendo en esa forma natural de nuestro planeta de aliviar los gases de efecto invernadero.
El cambio climático es, en definitiva, un tema muy serio del que todos debemos ser conscientes. Afortunadamente podemos hacer muchas cosas por revertirlo, como reciclar, proteger nuestros montes y nuestras costas de la suciedad, apostar por energías naturales y alternativas… ¿Y tú? ¿Qué medidas tomas para acabar con el cambio climático y para proteger nuestro medio ambiente?