La lectura es muy importante para el aprendizaje y para la vida en sí. Leer, como todos sabemos, nos amplía nuestras miras y nos permite viajar incluso sin mover un solo pie. Pero hacer de la lectura un hábito no es una tarea siempre sencilla, pues muchas cosas como el nerviosismo, la falta de atención, un ritmo de lectura inadecuado o la falta de paciencia, pueden ser barreras que hagan que los niños no se sientan demasiado atraídos por la lectura. Afortunadamente los adultos pueden hacer mucho al respecto, consiguiendo que los más pequeños se sientan atraídos por las buenas historias, los cuentos fascinantes, las aventuras…y consiguiendo también que los peques sean capaces de administrarse el tiempo poco a poco y de disfrutar de él, ya sea leyendo por cuenta propia o en familia.
Hábitos para acercar a los niños a la lectura
Una de las principales formas en las que, como adultos, podemos enseñar a los niños a leer y a amar la lectura, es haciendo que ocupe un espacio importante en nuestras casas y en nuestras vidas. De esta forma los niños crecerán observando el valor que tienen los libros en su familia, y adquiriendo el interés necesario para acercarse a ellos. Pero, ¿de qué forma podemos aplicar esta premisa?
- “Dejad que los libros se acerquen a mí”. Es muy importante que haya libros en una casa, para que los niños vayan siendo conscientes de que es tan importante la lectura como tener la casa limpia o la nevera llena. Pero es muy importante que dichos libros no sean simples accesorios u objetos de decoración que apenas se puedan tocar o alcanzar. Procura tener siempre alguna estantería de tipo infantil para que esto no ocurra, y con una serie de libros seleccionados y asequibles para la edad de los niños. Deja también alguno sobre la mesa del comedor o sobre la mesa de la cocina y no tengas miedo de que se estropeen. ¡Lo importante es que estén a nuestro lado y que podamos tocarlos y disfrutarlos!
- Desayunamos, comemos…leemos. Es importante que los libros nos rodeen, sí, y precisamente por ello es importante que sepamos también incorporarlos a nuestro ritmo diario de vida y a nuestras rutinas. Podemos realizar lecturas en familia antes de dormir, o a la hora de la sobremesa, crear rincones de lectura especiales para todos los miembros de la familia o disfrutar de alguna lectura amena y divertida a la hora del baño. ¿Por qué no? La idea es que leer sea algo que asuman los niños como imprescindible, como desayunar o comer.
- Disfrutamos de la biblioteca. La biblioteca, algunas librerías con espacios de lectura habilitados, ludotecas con cuentacuentos…son muchos los espacios que nos permiten disfrutar de una buena historia también fuera de casa, y es imprescindible aprender a utilizarlos y acudir a ellos para que los libros formen parte real de la rutina y sean asimilados también como otro elemento más del ocio y de la diversión al salir de casa. ¡Busca espacios con cuentacuentos o bibliotecas y librerías curiosas para acudir en familia!
- Leer es diver si sabes cómo. Es muy importante que no se asocie la lectura con algo como las tareas escolares o como algo aburrido, sino todo lo contrario. En este sentido, para acertar, es imprescindible utilizar la imaginación y la creatividad. Busca cuentos ideales para cada situación, por ejemplo, historias infantiles de miedo para cuando tus hijos queden con amigos en casa, o historias de piratas para la hora del baño…o tal vez uno de aventuras extraordinarias para la hora de dormir. ¡Hay historias excelentes para cada ocasión y cualquier momento es bueno!
- El mejor regalo es un buen libro. Cuando se acerquen fechas especiales en las que hacer regalos, haz que tus hijos vean que el libro es uno de esos que nunca pueden faltar. Ya sea para ti, para ellos mismos o para otros familiares o amigos, es importante que acudas junto a tus hijos a por ese regalo especial y que nunca falte el libro. De esta forma los niños, que siempre buscan imitar a sus padres, verán que la lectura es algo tan importante y mejor que cualquier otro regalo del mundo.
- Viajar y leer…todo es aprender. Cuando viajamos conocemos otros mundos, otras realidades, otras culturas…y exactamente ocurre lo mismo con los libros, solo que en lugar de despertar los sentidos de forma práctica, despertamos más la imaginación. En cualquier caso, si leer o viajar es importante, combinarlo puede ser algo extraordinario, y por ello es fundamental que cuando hagas o planifiques algún viaje nunca te olvides de meter en la maleta algún libro especial. ¡Dejará un recuerdo imborrable en los peques!
- Inventamos, hablamos y escuchamos. A veces estamos demasiados ocupados y todos estos consejos caen en el olvido y consideramos que no se puede sacar tiempo para ellos, que el día da lo que da y que no podemos estar todo el día fomentando la lectura. Y puede ser que haya algo de cierto es en esas prisas que llevamos y en esa falta de tiempo, pero el interés por la lectura no solo se fomenta utilizando libros físicos, ya que podemos hacer mucho por la lectura de otras formas también, como inventando historias en familia, o simulando que somos directores de cine de historias de animación… ¡lo que sea! Este tipo de actividades no tienen por qué llevar mucho tiempo y requieren de ese dinamismo y de esa improvisación de la que tanto disfrutan los peques. ¡Lo disfrutarán mucho y verán que sus papás tienen ideas geniales y muy divertidas!
¿Cuál de estas ideas te gusta más? ¿Has puesto ya alguna en marcha para fomentar el amor por la lectura?
25 septiembre, 2022
Primera vez que veo la página me pereció fabulosa.
11 octubre, 2022
Mil gracias por tus palabras, Kerlyn, nos ayudan a seguir con más ganas e ilusión. Un abrazo grande!!!