Los niños comienzan a tener la capacidad de aprender y comprender la hora a partir de los 5 años aproximadamente, una edad en la que ya se suelen dominar los números del 1 al 60 y en la que ya se tiene noción del tiempo. Sin embargo, es posible que haya niños que no tengan ningún interés en aprender la hora, probablemente porque no se haya probado a hacerlo a través de didácticas lúdicas y entretenidas capaces de motivar lo suficiente. Si esto sucede y damos con algún niño o niña al que las horas no parezcan llamarle la atención, podemos probar a enseñar las horas a través del juego, con lo que seguro que conseguiremos captar la atención de los más peques y hacerlo de forma rápida.
Aprendemos las horas a través del juego
A continuación, fíjate en las diferentes formas divertidas con las que puedes enseñar a los niños a aprender las horas en clase:
- Juegos para aprender la noción del tiempo
Una de las cosas más difíciles de aprender cuando se aprende la hora a tan corta edad es tener noción del tiempo, ya que se necesita una mente muy abstracta para entender que hay una línea del tiempo que involucra el pasado, el presente y el futuro. Una forma divertida de hacerlo es construyendo un reloj que no tenga números y que en su lugar tenga solo acontecimientos, además de una manecilla para cambiar el tiempo. Por ejemplo, en vez de poner las 7 a.m., se coloca una imagen del niño levantándose, a las 12 p.m. se coloca a un niño comiendo, a las 5 p.m. un niño en la ducha o a las 9 p.m. un niño de vuelta a la cama. Luego se les pide a los niños que actualicen el reloj de forma manual según la actividad que estén haciendo.
Esta actividad también puedes hacerla con actividades del aula solamente en lugar de rutinas de casa, y así los niños tendrán la oportunidad de levantarse cada vez y actualizar el reloj según la actividad que vayan haciendo.
- El proyecto de crear un reloj
Crear un reloj puede ser una actividad de manualidades en la que participen todos los niños de forma grupal o individual según sea el tamaño del proyecto. La idea es que los niños se familiaricen con las partes del reloj y con los números más importantes. Puedes hacer el reloj de foami, cartón, plástico… Las manecillas giratorias puedes hacerlas sujetándolas con una chincheta, y cuando todos terminen deja que todos los alumnos se lleven los proyectos a casa y se los muestren a sus padres.
- Tener un reloj en el aula
Con tan solo tener un gran reloj en el aula que dé la hora puedes estimular el aprendizaje de los más pequeños. Todos los días puedes preguntar la hora a un niño diferente y, si contesta acertadamente, hacer que gane estrellas o puntos. Esas estrellas podrían intercambiarlas luego por regalos u horas libres para jugar. Esta es una forma de integrar a todos los niños en el juego e incentivar que aprendan la hora para ser los primeros en contestar correctamente.
- Fichas para marca la hora en el reloj
Otro juego que podemos realizar para enseñar las horas precisa tan solo de una hoja de papel. Entrega a cada niño una hoja con el dibujo de un reloj analógico sin las manecillas. En la parte de abajo del reloj puedes poner una hora de forma digital, digamos por ejemplo las 11:45. La idea es que los niños dibujen la manecilla marcando la hora dada. La hoja puede contener varios relojes, así que podrán repetir la actividad con varias horas distintas.
Podrás encontrar en nuestra página de juegos del Bosque un montón de fichas para trabajar las horas de este estilo, así como una colección de juegos divertidos y originales de las horas con los que los niños se lo pasarán en grande mientras aprenden las horas del reloj. ¡Pon en práctica estos sencillos juegos y verás cómo los niños recordarán el aprendizaje de la hora de forma muy divertida y grata!
