Una madre cansada de los eternos berrinches de su hijo, publicó recientemente una controvertida carta que suscitó un acalorado debate. Resulta que la madre, días atrás, había sido advertida por los directivos del colegio de los bajos resultados académicos que su hijo estaba obteniendo. Además de la actitud rebelde que mantenía, también descubrió que le estaba ocultando cosas. En esta carta, la madre supo cómo expresar su frustración de manera positiva por los frecuentes arrebatos de su hijo y sus propios sentimientos de impotencia.
La madre había descubierto que el niño pasaba muchas horas en internet realizando videos con los cuales ganaba dinero. Ese era el motivo por el que había descuidado sus responsabilidades escolares. En este punto, cualquier buen padre o madre sabe que criar a un hijo puede llegar a ser bastante complicado, sobre todo cuando atraviesa la adolescencia, y las nuevas tecnologías no ayudan en la tarea.
Puede ser una época difícil tanto para los padres como para los hijos, ya que se enfrentan a los cambios y emociones propios del crecimiento. Sin embargo, con paciencia y comprensión, los padres pueden ayudar a sus hijos en este periodo de transición y dotarles de las habilidades y conocimientos que necesitan para convertirse en adultos independientes y de éxito.
¿Qué buscaba la madre al escribir la carta?
Antes que nada, la madre comprendió que no ganaba nada confrontando directamente a su hijo con sus mentiras y su rebeldía. Su niño estaba atravesando una etapa difícil en la que uno quiere sentirse como un adulto y tomar sus propias decisiones, y eso es lo que hace que parezca siempre que ya lo saben todo, aunque no sea así.
Como madre, era su responsabilidad orientar y enseñar a su hijo durante esa etapa, permitiéndole explorar su independencia y consiguiendo que tratara de afrontar sus propias decisiones. Y eso fue exactamente lo que hizo, mostrarle cuáles eran las responsabilidades que debía tener si quería tomar sus propias decisiones, como por ejemplo hacerse cargo de ciertos gastos personales aprovechando que ganaba ya un dinero. No sin antes, eso sí, expresarle lo preocupada y cansada que estaba de su actitud.
La carta de esta madre se hizo rápidamente viral y muchas personas expresaron su apoyo hacia su postura, aunque también hubo otros que argumentaron que la madre no debía tolerar ese comportamiento de su hijo, pues no es un signo de buena crianza. Sin embargo, esta madre podría ser casi cualquier otra, pues no hay padre ni madre que no deba enfrentarse hoy en día a ciertos desafíos por parte de los hijos, auspiciados en buena medida por el uso de internet y de las redes sociales.
En muchas familias se repite la misma historia
La historia de esta madre ha calado hondo en muchos padres que han pasado por dificultades similares. Su carta ha suscitado una conversación muy necesaria sobre los retos de la paternidad y las dificultades a las que se enfrentan padres y madres, sobre todo al hacer frente a las rabietas de sus hijos.
Pero también ha planteado otras cuestiones, como la de cuál puede ser la mejor manera de manejar estas situaciones y cómo hacer que los niños puedan reflexionar sobre sus propias acciones sin que puedan verlo como un castigo, sino como una consecuencia. Sea como sea, lo más importante siempre es encontrar la forma más positiva de llamar la atención de los hijos para lograr enfrentar sus eternos berrinches.
Cómo hacer frente a las rabietas o berrinches de un niño
Las rabietas y los berrinches pueden ser una parte normal del desarrollo de un niño, pero también pueden ser difíciles de manejar. Cuando un niño tiene un berrinche o una rabieta, es importante mantener la calma y proporcionarle un entorno seguro. Los padres deben intentar comprender los sentimientos del niño y proporcionarle consuelo y tranquilidad, y así hasta que pase la tormenta.
Pero es importante establecer límites y expectativas claras para el niño con un refuerzo positivo cuando comience a ser capaz de controlar sus emociones. Esto era lo que buscaba la madre del niño con su carta, dejarle claro al niño que debía esperar si quería actuar como un adulto y cuáles serían sus nuevas responsabilidades cuando llegase el momento: pagar facturas, encargarse de ordenar y cuidar la casa…y un sinfín de tareas más.
Al final, con las estrategias y el apoyo adecuados, los niños pueden aprender a manejar sus emociones y a controlar sus berrinches de forma sana y productiva.
¿Por qué la adolescencia es una etapa difícil para los padres?
A muchos padres se les hace difícil educar a sus hijos sobre todo cuando se encuentran en la adolescencia, porque esta etapa conlleva muchas incertidumbres y angustias. Por eso la comunicación para fomentar una relación sana entre padres e hijos es muy importante, sobre todo a esta edad.
Al comunicarse, los padres deben escuchar a sus hijos adolescentes con atención y sin juzgarlos. Se deben mantener líneas abiertas de diálogo y conversaciones regulares, incluso cuando pueda parecer difícil. Y, aunque mostrar autoridad es importante, darles responsabilidades a los adolescentes es igual de valioso o más.
Así, como en el caso de la carta que da pie a este artículo, se deben fijar límites adecuados para ayudar a establecer el respeto, fomentando la independencia y estimulando la resiliencia. Hay que animar a los niños a que tomen sus propias decisiones dentro de ciertos límites establecidos, pero siempre dejando claro por parte de los padres, cuáles son las expectativas y también las normas.