Estimular los sentidos en los niños representa una experiencia de gran impacto y agrado para ellos, si sabemos adaptarlo a didácticas y actividades divertidas. Jugar es una forma de pasar el tiempo aprendiendo del mundo que nos rodea y que toca enfrentar, y por eso mismo, en este artículo, hemos preparado unas sencillas manualidades pensadas para que los más pequeños desarrollen sus sentidos: olfato, tacto, oído, vista y gusto. De esta forma también les ayudaremos a identificar con más precisión los sentidos y sus funciones y características, y a desarrollar mejor, a priori, el sentido del cuerpo que más les guste o atraiga.
Ideas para aprender y desarrollar los sentidos
MANUALIDAD PARA EL SENTIDO DEL OLFATO
Para estimular el olfato lo primero que debes saber es que este sentido se encuentra vinculado con el centro de las emociones del cerebro. Estimularlo puede ser muy sencillo teniendo en cuenta que los olores pueden trasladarnos a cualquier lugar. Para esta actividad necesitarás:
- Algodón en bolitas.
- Palitos de helado.
- Vinagre.
- Canela en polvo.
- Esencia de vainilla.
- Limón.
- Aceites esenciales.
En qué consiste la actividad:
La actividad consiste en impregnar los palitos de helado con los aceites esenciales y escribir en un cuaderno el aroma que se percibe. Las bolitas de algodón también las impregnaremos una a una de sustancias como el vinagre, la vainilla, el limón o la canela, entre otros, ya que son olores muy potentes y característicos, interesantes para esta actividad. Tras esto habrá que ir tomando nota de lo que los niños van percibiendo paso a paso. También lo pueden anotar a través de dibujos para una experiencia más directa, y si aún no saben escribir alguna palabra en concreto.
MANUALIDAD PARA EL SENTIDO DEL TACTO
El tacto es un sentido capaz de percibir el entorno físico a través del contacto o la presión de las cosas sobre nuestra piel. Con el tacto se pueden distinguir las cualidades que tienen los objetos, como la forma, el tamaño, la temperatura, la rugosidad, la suavidad, la aspereza, la dureza, o muchas otras texturas más. Para identificarlas, te proponemos hacer una manualidad para la que necesitarás lo siguiente:
- Cartulina.
- Rotuladores.
- Lija.
- Piedrecitas.
- Algodón.
- Slime.
- Tijeras.
- Pegamento.
En qué consiste la actividad:
Para trabajar el sentido del tacto, dibuja el contorno de tu mano derecha sobre la cartulina y haz lo mismo con la mano izquierda en caso de tener más de cinco texturas (marca también los dedos). A continuación corta un rectángulo de lija del mismo tamaño de los dedos que has dibujado en la cartulina y pégalo sobre uno de ellos. Ahora haz lo mismo con el resto de los dedos, pero colocando otros materiales, como el slime, algodón o las piedrecitas. Permite que el niño toque todos los dedos del dibujo y experimente las sensaciones del tacto con las diferentes texturas de materiales.
MANUALIDAD PARA EL SENTIDO DEL OÍDO
El oído es el sentido que más desarrollado tenemos en el momento de nacer, permitiéndonos percibir y distinguir sonidos como la voz de nuestra madre. Pero para trabajar más este sentido del oído, os traemos esta manualidad en la que necesitaremos hacer un palo de lluvia con los siguientes materiales:
- Tubo de cartón.
- Pinturas a base de agua.
- Pinceles.
- Tijeras.
- Arroz.
- Garbanzos.
- Piedrecitas.
En qué consiste la actividad:
Pinta el tubo de cartón con los colores preferidos del niño/a o con los que tengas a mano. Ahora tapa uno de los extremos utilizando otros restos de cartón, pégalos con pegamento y déjalo secar. Una vez seco todo, agrega los granos de arroz, las piedrecitas, los garbanzos y algún otro material que pueda emitir sonido, como las alubias o la pasta y el arroz. Tapa el otro extremo del tubo de la misma forma que lo hiciste anteriormente y déjalo secar. Ya seco, deja que el niño lo mueva experimentando los sonidos relajantes que esta manualidad emite.
MANUALIDAD PARA EL SENTIDO DE LA VISTA
La vista es el sentido más fácil de estimular por lo que, en consecuencia, existen infinidad de manualidades que incitan dicho desarrollo de la vista. Hoy hemos seleccionado una de ellas para que la hagas en casa o en el cole, y los materiales que necesitarás son:
- Filtros de cafetera.
- Marcadores de diversos colores.
- Frascos pequeños de vidrio, preferiblemente de compotas.
- Agua.
En qué consiste la actividad:
Llena los frascos de vidrio de agua hasta la mitad. Usa tantos frascos como marcadores tengas. Dibuja en el interior del filtro varios círculos del mismo color y después dóblalo y ponlo en la boca del frasco de vidrio. Asegúrate de que el filtro toque el agua. Observa a continuación cómo el agua se tiñe lentamente con el color que has usado. Ahora puedes hacer los demás a la vez o como prefieras, o teñir primero el agua con diferentes colores e ir haciendo mezclas o cambiándolas de recipientes para apreciar las diferencias.
MANUALIDAD PARA EL SENTIDO DEL GUSTO
El gusto es el sentido corporal que nos permite detectar los sabores, y la mejor forma de estimularlo es a través de la comida. La manualidad ideal para estimular este sentido es la de preparar una serie de platos con frutas de distintos sabores. Para ello necesitarás:
- Plátano o banana.
- Naranja.
- Piña.
- Mango.
- Limón.
- Un trozo de tela para vendar los ojos.
- Un cuenco.
En qué consiste la actividad:
Para realizar la actividad del sentido del gusto, lo primero que debes hacer es vendar los ojos del participante para que no pueda identificar la fruta con la vista. Colócale un trozo de fruta del tamaño adecuado en su boca y luego, tras probarla, pídele que la identifique y que cuente su experiencia, o que la ilustre en un cuaderno tal cual la haya percibido.
Todas estas actividades han sido pensadas para trabajar los 5 sentidos del cuerpo de manera lúdica, y pueden desarrollarse en casa o en el salón de clases. Además, son una excelentes estrategia para estimular la participación de los niños en grupo y promover la discusión y el trabajo en equipo.