LAS EMOCIONES Y EL DESARROLLO EMOCIONAL
Para trabajar la empatía y cultivar el desarrollo de la inteligencia emocional, es muy importante enseñar a los más pequeños a trabajar sobre los sentimientos y sobre aquello que nos agita por dentro sin saber a veces muy bien el por qué. Las emociones nos sacuden y nos visitan en muchas ocasiones: cuando estamos contentos, cuando nos enfadamos, cuando sentimos vergüenza, cuando estamos tristes por algún motivo… y es fundamental ayudar a los niños a entender dichas situaciones, así como el invitarles a expresarlas. Solo de esa forma podremos, como adultos, entender lo que les sucede en cada ocasión, y ellos a su vez, podrán entender mucho mejor el mundo que les rodea.
Gracias al control de nuestras emociones conseguimos ese equilibrio deseado en la vida; ese equilibrio que nos ayuda a seguir adelante sin venirnos abajo o sin tomarnos la vida a broma. Pero esto no son cosas particulares de los adultos, y los niños también deben aprender a encontrar su equilibrio propio y personal, ya que esto les permitirá ser responsables en su día a día y distinguir entre lo bueno y lo malo, la felicidad y la tristeza, o el colegio y las vacaciones.
Si un niño no sabe muy bien controlar ni distinguir sus emociones, puede acostumbrarse a tener rabietas o enfados solo cuando quiera o se le antoje algo, y no cuando tenga motivos verdaderos para sentirse frustrado, o a gritar en lugar de reír cuando esté contento. Esto no quiere decir que debamos coartar la libertad de los más pequeños, y desde luego un grito en determinadas ocasiones para liberar tensiones puede ser muy beneficioso para todos. Lo importante es distinguir la ocasión y la situación, y ayudarles en ese proceso de búsqueda e identificación está en nuestra mano.
Cuando un niño reconozca y exprese adecuadamente sus emociones, tendrá la capacidad también de reconocer las de los demás y de ponerse en el lugar del otro cuando observe un llanto, un enfado, o a una persona súper feliz. Nuestro hijo habrá desarrollado de forma positiva su inteligencia emocional, lo cual será una total garantía de vida y de éxito para su futuro y su desarrollo personal en la sociedad.
Una bonita y sencilla forma de trabajar con los peques las emociones son las fichas educativas. Tarjetas en las cuales destaca una imagen llamativa y colorida, que les ayuda a identificar sus propias emociones. Si aún no has trabajado con este tipo de materiales te facilitamos el trabajo. A través de las fichas básicas que te proponemos, los niños irán reconociendo sentimientos y emociones cotidianas que retendrán en su cabeza gracias a la diversión que los dibujos animados y las ilustraciones les proporcionan.
¡Un placer para la vista y para los sentidos!
13 abril, 2017
Me parecen muy prácticas las fichas de las emociones
14 abril, 2017
Maravilloso! Gracias por el material tan interesante. Saludos cordiales
14 abril, 2017
Es lo que se debería trabajar en la primera infancia siempre excelente información, gracias
19 mayo, 2017
muy interesante el material