Tratamiento psicoeducativo en la escuela y el hogar para niños con autismo

El niño con trastorno del Espectro Autista (TEA) presenta una condición de origen neurológico y de aparición temprana, frecuentemente aparece antes de los tres años de edad, que puede estar asociado o no a otras condiciones.  Presentan una serie de características, como desviaciones en la secuencia del desarrollo, alteraciones en la relación social, trastornos en el lenguaje y la comunicación, además de problemas sensoperceptivos y cognitivos que  ocasionan  rutinas, estereotipias, resistencia al cambio e intereses restringidos, todo lo cual interfiere en su interacción con las otras personas y con el ambiente.

De allí, la importancia de tratamientos psicoeducativos por equipos multidisciplinarios a temprana edad que incidan en la aplicación de técnicas y estrategias psicológicas, pedagógicas, de lenguaje y sensoperceptivas adecuadas para cada niño en particular. Igualmente, la orientación a los padres y sobre todo las terapias psicológicas para la  aceptación de la condición, única forma de poder ayudar a nuestros niños con TEA.

 

¿Cómo aplicar terapias psicoeducativas para el Trastorno del Espectro Autista?

Según los criterios definidos en el Manual American Psychiatric Asocciation (APA, 2013) o el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM–IV-TR (López-Ibor y Valdés, 2002), definen las características del autismo con los siguientes criterios para su diagnóstico

  • La alteración cualitativa de la interacción social.
  • La alteración cualitativa de la comunicación.
  • Patrones de comportamiento, intereses y actividades restringidos, repetitivos, y estereotipados.

Para el tratamiento Psicoeducativo es necesario brindar la atención en cada uno de estos criterios, es importante que estas técnicas y estrategias se apliquen en la escuela y en el hogar estén unas más alteradas que otras. Lograr su independencia social y establecer su proyecto de vida debe ser la meta que todo padre y maestro se propondría.

A continuación se mencionan 4 estrategias que puedes aplicar en la escuela y en el hogar para el desarrollo de habilidades en: la interacción social, la comunicación y las modificaciones de conducta.

La enseñanza estructurada una forma de aprender

Muchos niños con TEA presentan alteración en la comprensión sensoperceptiva de su entorno por lo que se le dificulta la interacción social con su ambiente y los que lo rodean, una técnica efectiva para favorecer la relación niño-ambiente es la enseñanza con técnicas estructuradas. Estas técnicas están representadas en darle al niño información por adelantado, favorece la comprensión de lo que el adulto, padres o cuidador les se desee expresar, y potencia su memoria visual.

Por ejemplo, se realiza una serie de imágenes de la rutina del día donde se le incentiva a observarlas y con instigación verbal se muestran repetidamente las acciones a desarrollar bien sea en la escuela o en el hogar.  Esto se hace al levantarse, para lavarse los dientes, para desayunarse, para ir a la escuela y así sucesivamente, hasta que el niño logre comprender la tarea.

Preparación de los padres y maestros para la atención del niño en el aula y el hogar

La formación de la familia es fundamental para el proceso de adquisición de técnicas y estrategias que pueden ser abordadas en el hogar y la escuela. Los padres y maestros deben instigar el contacto visual, cruzar la mirada cuando se les está hablando al niño, ponerse a su altura en las acciones que se les piden y al hablar exagerar el tono y las expresiones, estas, son algunas de las acciones que se deben manejar cuando se les da una orden.

Esto estimulará los procesos de comunicación e interacción social. Abrázalo y bésalo aunque te ignore por las conductas bien realizadas. Salúdalo, juega con él aunque creas que no está escuchando, tu voz lo tranquiliza y pronto te devolverá del mismo modo tus caricias.

Incentivo para el lenguaje y la comunicación

Otras de las formas para estimular la interacción y la comunicación social es lograr “atribuir la intención comunicativa”, ésta no es más que hacer y construir la comunicación como si sus acciones fueran comunicativas, es decir  responder y poner palabras donde no las haya. Esto logrará que el niño intente responder e imitar la acción repetidamente y de esta forma comprender que por cada tarea siempre tendrá que brindar una respuesta. Así ayudará al maestro y a los padres a realizar actividades que lo llevarán a la adquisición del aprendizaje.

Enséñale a manejar los eventos inesperados

Anticípale lo que va a ocurrir, los eventos improvisados alteran el estado emocional y de ánimo del niño con autismo. Es importante, que le digas que se van de la fiesta porque está lloviendo o que no hay escuela porque se dañó el auto.  El anticiparles las actividades que ocurrirán logrará tranquilidad en él y se irá adaptando a las eventualidades poco a poco. Compréndelo cuando no sepa manejar las situaciones inesperadas.

 

La interacción social del niño en el hogar y la escuela propicia la adquisición de habilidades y destrezas en la comunicación social. Por esto, es importante la integración social y educativa en los primeros años de vida, potenciando el proceso de socialización, comunicación y cognición.

Autor: Jesús Falcón

Cofundador del Proyecto educativo Bosque de Fantasías, programador y desarrollador por excelencia, dedicado al mundo educativo y a su evolución.

Comparte este artículo en

Envía un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *