El deporte es parte esencial en el desarrollo de los niños, ya que ayuda a ejercitar sus destrezas físicas, a socializar y a divertirse. Además aprenden a jugar limpio y a mejorar su autoestima.
La actividad física en los menores de cinco años se considera fundamental, pues permite un desarrollo psicomotor a través del cual aprenden a identificar sus segmentos corporales y a coordinarlos entre sí. Asimismo, el deporte mejora las funciones cardiovasculares y contribuye a una adecuada formación de los huesos.
Para que el niño tenga un correcto desarrollo, su inicio en la práctica deportiva debe ser de manera placentera y de forma progresiva. Hay siempre que controlar la salud del niño y consultar con especialistas para determinar qué tipo de deporte es el más adecuado para el pequeño, según sus características físicas y su carácter. El esfuerzo debe intensificarse poco a poco y con sumo cuidado, porque en esta fase el niño se encuentra en un proceso de desarrollo orgánico y corporal.
Es importante recordar que las actitudes y el comportamiento que se les enseña a los niños en el deporte debe ser siempre el de competir y no el de ganar como sea. Los padres, en este sentido, deben tener un papel activo y ejemplar, ayudando al niño a desarrollar el valor de la honradez.
Otro asunto esencial es hablar acerca de lo que los niños observan en los eventos deportivos. Como padres y educadores debemos enseñar a los más pequeños que el comportamiento irrespetuoso no es aceptable bajo ningún concepto.
Recomendaciones a tener en cuenta
- Asiste a los juegos donde tu hijo participe. Comenta el resultado y la actitud de tu pequeño durante el encuentro.
- Estimula a tu hijo para que te cuente cosas acerca de sus experiencias con el entrenador y con otros miembros del equipo.
- Ayuda a tu hijo a manejar las decepciones y a que aprenda a perder. No siempre se puede ganar en la vida y es importante darse cuenta de ello cuanto antes.
- Compórtate como un espectador modelo y respetuoso. Así tu hijo te imitará.
La importancia del movimiento
Los niños no dejan de moverse. A través del movimiento van aprendiendo y conociendo el mundo que les rodea. Por lo general los pequeños necesitan moverse de un lado a otro, ya sea corriendo, caminando, subiendo y bajando escaleras…, eso sí, cada uno a su ritmo.
Es por esto que los niños necesitan juegos que les permitan desarrollar sus músculos. Una vez que el niño ya haya comenzado a desarrollar sus músculos más grandes, hay que poner atención en los más finos. Es importante que el pequeño aprenda a sujetar bien los lápices de colores y también a clasificar y seleccionar objetos.
Consideraciones importantes
- Motiva a tu hijo a bailar. Este es un buen ejercicio para desarrollar los músculos y, además, a los niños les encanta.
- Dale a tu pequeño una caja de huevos vacía donde pueda guardar botones, fideos y lápices. Así podrá desarrollar sus músculos finos y aprenderá a clasificar los objetos.
- Enséñale a tu hijo a atarse los zapatos, o bien, a armar puzles. Situaciones cotidianas y divertidas que permitirán también el desarrollo de su inteligencia.
6 diciembre, 2017
Es importante seguir estas sugerencias para que nuestros hijos se motiven y sientan que siempre los estamos apoyando.