El papel del carácter en el futuro de los hijos
Sí, el carácter forjará el destino y el futuro de los hijos, y por esa razón es fundamental otorgarles una buena educación. Sin embargo, la realidad es que formar la personalidad de un niño/a es una de las tareas más compleja de los padres, que por desgracia no disponen de manual de instrucciones para poder hacerlo bien y a tiempo.
Para contribuir positivamente a la hora de formar la personalidad de nuestros hijos, lo principal es tener presente que el desarrollo del carácter debe tener la más alta prioridad en esa lista de quehaceres diarios. Como padres y madres, debemos entregarles sabiduría, inculcarles fortaleza y dotarles de autocontrol, por ejemplo. A su vez, y en otro orden de cosas, debemos educarles y enseñarles la importancia del amor y la humildad, así como inculcarles una actitud positiva frente a la vida.
Y en todas estas cosas que deberíamos enseñar a los más pequeños, se encuentra por encima de todas la responsabilidad del ejemplo, de predicar y poner en práctica todo aquello que les decimos a ellos, enseñándoles a resolver sus propios problemas de manera justa y otorgándoles responsabilidades dentro del núcleo familiar. Es decir, que para poder conseguir un desarrollo exitoso de la personalidad de un niño, no puede faltar el amor, la confianza y la oportunidad de que desarrollen y potencien sus habilidades de la forma más sana posible.
Consecuencias de no tener una disciplina con nuestros hijos
Son muchas las personas que no tienen demasiado claro en qué consiste tener disciplina con los hijos, y pueden llegar a confundirlo con castigos u otras cosas similares. Para muchos padres y madres dicha palabra significa autoridad, abuso, coerción…, sin embargo, la disciplina consiste verdaderamente en enseñar y lograr que ellos comprendan cuáles son los comportamientos adecuados, así como en que sean capaces de tomar las decisiones adecuadas en la vida.
Si a nuestros hijos los tratamos con una disciplina amorosa, entonces podrán ser niños responsables y podrán mostrar un respeto adecuado hacia los demás. Es evidente, entonces, que enseñar disciplina positiva es vital para un buen desarrollo de los más pequeños, y no tener claro en qué consiste puede dificultar mucho esta tarea y conducirnos a errores que a la larga podrían ser graves.
A continuación podrás descubrir cuáles son algunas de las consecuencias más graves de no tener una disciplina adecuada con los más pequeños:
- Un niño/a que es indisciplinado en su casa, será indisciplinado también muy probablemente en otros lugares como el colegio, casas de amigos o familiares…y, además, le costará convivir con otras personas y niños de su edad.
- Los niños y niñas indisciplinados pueden presentar problemas a la hora de estudiar y de emprender cualquier otra actividad en su vida que requiera de concentración. La falta de disciplina bien entendida y aplicada, hace que este tipo de niños y niñas no tengan costumbre de concentrarse, lo que les generará muchos problemas, especialmente escolares.
- Si los padres no enseñan una buena disciplina a sus hijos, se arriesgan a que finalmente tomen decisiones en su día a día sin saber claramente lo que es bueno y malo de forma no intencionada y consciente.
- La falta de disciplina también puede generar otras deficiencias importantes, como la falta de principios y de valores, o la falta de respeto, cariño y/o comunicación.
Muchos padres creen que disciplinar a los niños es responsabilidad de los profesores en sus respectivos colegios, lo que puede llegar a hacer que veamos casos de niños que cambian de escuelas por decisión de los padres, que consideran que no se ha hecho todo lo necesario por parte del centro escolar. Sin embargo, es importante tener claro, para evitar estas situaciones, que la escuela solo está encargada con respecto a los niños de proporcionar educación y que los valores deben enseñarse en casa.
En la educación de un apersona cuentan muchos pilares, y por eso los adultos debemos informarnos y ser conscientes de qué papel debe jugar cada uno de ellos.
¡Pongamos todos de nuestra parte!