A veces a los padres nos gusta bromear diciendo que nuestros niños preferirían jugar con la caja que con el juguete que venía en ella. Sin embargo, cuando es hora de comprar juguetes para las fiestas, nos encontramos siempre abrumados por las opciones y la caja deja de parecernos la mejor opción.
Tal vez lo de la caja sea un poco excesivo, pero sí que sería importante que reflexionásemos acerca de los beneficios que tienen los regalos que hacemos y los juguetes que se compran, y que no olvidemos que lo importante de la Navidad es disfrutar del tiempo en familia. Si además conseguimos que dichos regalos aporten mensajes importantes y valiosos a los niños, como el de compartir o cuidar el medio ambiente, habremos dado con la clave en cuanto a la elección de un buen regalo se trata.
Cosas que sí merece la pena regalar
- Juguetes de siempre. Los juguetes tradicionales, como las muñecas de tela, los bloques de madera, los coches o los carritos de metal, pueden no tener muchas luces y sonidos, pero son los que nuestros niños buscan una y otra vez. Los juguetes bien hechos que fomentan el juego abierto e imaginativo tendrán una vida útil más larga que los juguetes de plástico que solo funcionan de una manera. Estos juguetes son divertidos y sus modelos tradicionales no requieren el uso de pilas, lo que significa que tienen menos impacto ambiental.
- Salud y aire libre. Si hay una forma de jugar al aire libre por excelencia en la infancia es la de montar en bici. Y es que no hay mejor forma de compartir el tiempo con las amistades y la familia que desplazándose de un lado a otro sobre dos ruedas, al tiempo que se hace ejercicio y se mejora el estado de la salud. Pero hoy en día las bicicletas aportan muchos beneficios más, como el de concienciarnos sobre la necesidad de proteger el medio ambiente y de abandonar los malos humos, lo que nos permite el uso de las bicicletas eléctricas, ideales para desplazamientos urbanos y también diseñadas especialmente para niños.
- Nuevos accesorios. En lugar de regalar juguetes nuevos y diferentes cada año que distraigan a los peques de los favoritos actuales, los complementos mantienen a los niños también interesados en los juguetes que ya se tienen. Recurre, por ejemplo, a los juegos de expansión de bloques, accesorios de muñecas o de manualidades, que permitirán que los niños puedan renovar el interés por sus juguetes viejos y usados.
- Alquilares o intercambios de juguetes. Los juguetes que son emocionantes en diciembre generalmente se tiran a un lado en abril, lo que puede suponer una gran cantidad de dinero y recursos desperdiciados. Por eso hoy en día existen empresas dedicadas al alquiler de juguetes, que permiten dar una segunda vida y oportunidad a muchos de ellos y caer en manos de niños que disfruten jugando como si fuera la primera vez. Además de reciclar, esta forma de adquirir juguetes supone una importante concienciación sobre nuestros hábitos de consumo.
- Tesoros generacionales. Conservar juguetes puede ser importante también, sobre todo cuando se trata de juegos valiosos que seguro merecerá la pena recordar pasado el tiempo. Guarda los juguetes más bonitos y especiales de tus peques en el trastero, porque el día de mañana podrán ser un tesoro incalculable para sus hijos y nietos. ¿Acaso no sería especial para ti poder ver con qué juguetes se divertían tus padres o abuelos?
- Bonitas experiencias. No todos los regalos valiosos se pueden envolver, y eso es lo que ocurre con los viajes y las experiencias en la naturaleza, por ejemplo. Este tipo de regalos proporcionan recuerdos y momentos de por vida, que no se esfuman como se esfuman las ganas de jugar con un muñeco determinado. Además, el dinero que te puedes ahorrar evitando juguetes que terminan olvidados, podrás invertirlo en un gran viaje digno de recordar.
Otras actividades y juegos para no aburrirse
Y como todo no tienen que ser regalos físicos y juguetes, queremos ofreceros una serie de actividades y juegos fantásticos para que el aburrimiento no haga acto de presencia durante las vacaciones y los niños puedan disfrutar de tiempo de calidad en ellas junto a la familia. ¡Toma nota!
- Hacer un castillo encantado con una caja de cartón.
- Usar un rollo grande de papel blanco para envolver los regalos de Navidad y dejar que los peques lo decoren con marcadores, sellos, pinturas…
- Recortar imágenes de revistas y hacer un collage con temática navideña.
- Decorar un plato o una taza vieja para regalar a algún familiar.
- Hacer masa de sal o plastilina casera y fabricar adornos para la casa.
- Hacer un zoológico para los animales de peluche cortando cajas de cartón y pegándolas.
- Convertir la habitación de los peques en una selva tropical dibujando y cortando plantas y animales.
- Hacer una escultura atómica usando palillos, nubes de golosina y gomas de colores.
- Cortar copos de nieve de papel y colgarlos de las ventanas para las fiestas.
- Escribir a los abuelos una carta o grabar un video con frases de cariño.
- Escribir diez cosas que gustan de cada persona de la familia y leerlas en Nochebuena.
- Planear un juego de búsqueda del tesoro con pistas para disfrutar en familia.
Y tú, ¿qué ideas tienes para los juguetes y las vacaciones de este año?