Las relaciones humanas son complejas y los niños comienzan con esas relaciones desde muy temprana edad, primeros con sus familiares y después con el entorno social donde conviven. Sin embargo, muchos niños no saben cómo enfrentar situaciones de agresión con otros niños, por lo que es importante educar a nuestros hijos para estos eventos.
5 Consejos para que nuestros hijos aprendan a enfrentarse a la violencia sin caer en ella
- Enséñale autocontrol
Varias investigaciones han demostrado que el autocontrol se enseña desde muy temprana edad e incluso el ejemplo de los padres a auto controlarse ante situaciones cotidianas del hogar, es la mejor forma de enseñanza a nuestros niños. No obstante, el enseñar a nuestros hijos a detectar al acosador y enfrentarlo utilizando la estrategia de la ignorancia logra desinterés en él, y muy probablemente deje de molestarlo. Se les pueden enseñar algunas técnicas de autocontrol como respirar profundo o contar hasta 10, entre otras.
- Alimenta su autoestima
Desde pequeños debemos promover la autoestima de tus hijos, para que estén seguros de sí mismos. Estimulados de esta manera, asumirán actitudes eficaces, de defensa frente al agresor.
Ante eventos de violencia deben asumir una postura corporal tranquila, relajada y no persuasiva, mirando a los ojos al agresor que lo conlleve a pensar que la persona no es sumisa. El niño agresor siempre querrá estar por encima del agredido, es por esto que debemos enseñar a nuestros hijos a tomar posturas de valentía, sin caer en la provocación del agresor.
- Enséñale a evitar la agresión
Muchos niños actúan con agresividad sobre todo en la edad escolar, por lo que al respecto debemos explicarles a cómo evitar las agresiones. Una forma de evitarlas es alejarse cuando estas se produzcan. Otra manera es responder al agresor como si la agresión no tuviera importancia, esto ayuda a calmar el ambiente violento y el agresor ignorará el evento.
- Ayúdale a la toma de decisiones
Cada situación presentada en la escuela, en el hogar o en el vecindario de agresividad, debe ser respondida de forma clara y contundente; y cada conflicto con lleva a una toma de decisiones. Si el niño es muy pequeño debemos ayudarle a tomar las mejores decisiones de forma clara. También, debemos enseñarle a tomar roles que le permitan ir aprendiendo de los diferentes conflictos que se le presenten. La orientación de los padres es fundamental para la toma de decisiones desde la temprana edad.
- Enséñale a tenerte confianza
La confianza del niño a los padres, juntos o por separado, se genera cuando éste se siente seguro y acobijado por ellos, de allí que sea importante enseñar al niño a conversar sobre las situaciones del día a día y a pedir ayuda cuando la necesite. En situaciones de conflicto siempre es importante recalcar la confianza, porque de ello dependerá la debida orientación de las situaciones y facilidad para poder generar la ayuda necesaria cuando lo requiera.
10 julio, 2018
me parece muy interesante y ayuda mucho a nuestra labor como docentes.