Cómo trabajar el conteo a través de la motricidad gruesa

En este artículo, dedicado a ofrecer estrategias nuevas con las que trabajar el conteo, se busca que dichas estrategias originales y novedosas incorporen a su vez otros beneficios adicionales positivos, como por ejemplo, trabajar al tiempo la motricidad gruesa.

La actividad, ideal para grupos de infantil, ha sido planificada de la siguiente forma: los estudiantes deberán practicar el conteo a través del ejercicio físico, como por ejemplo los saltos, aprendiendo a contar mentalmente mientras cooperan en grupo. Esta actividad es multidisciplinar, por lo que permite que la trabajen distintos perfiles de maestros (educación física, matemáticas) o incluso que varias disciplinas se aúnen para llevarla a cabo en juegos o competiciones a nivel de diferentes colegios.

 

MATERIALES NECESARIOS

  • Una pelota de goma (o comba, o hula hop…).
  • Un lápiz por alumno.
  • Una hoja de papel por grupo de mesas.
  • Mucha imaginación y rapidez.

 

aprender a contar

 

 

Cómo trabajar el conteo a través del ejercicio físico

Para llevar a cabo la actividad el aula debe dividirse en grupos cooperativos de unos cuatro o cinco alumnos. Una vez organizada la clase, el profesor puede preguntar: “¿Quién puede contar cuántos somos en la clase más rápido?” Haz que un alumno se ponga de pie y cuente de cuántos miembros se conforma la clase. Lo más probable es que los estudiantes cuenten de uno en uno a la hora de hallar el total.

Una vez realizado este sencillo paso, puedes preguntar lo siguiente: “¿Existe una manera más fácil o rápida de contar a todos los miembros de esta clase?” Si los estudiantes no lo hacen por sí mismos, enséñales a contar de dos en dos o de tres en tres y hazles ver que es una forma mucho más rápida de contar grupos de personas. Si aun así no lo consiguen, demuéstraselo separando a los alumnos de dos en dos o repartiendo algún objeto por cada dos alumnos. Por ejemplo, puedes también ayudarte de una pelota y hacerla botar tantas veces como alumnos haya; los estudiantes deberán saltar al tiempo e ir contando con saltos los botes que se sucedan. De esta forma los alumnos también harán un breve calentamiento que les permitirá concentrarse mejor para la siguiente parte de la clase.

También puedes hacer esta actividad de la pelota con los niños de uno en uno. Para ello deberás pedir algún niño o niña que salga y se ponga de frente a la clase. Deberá dar tantos saltos como botes de la pelota escuche, y el resto de alumnos (de forma individual o en grupos), con ayuda de una hoja y un lápiz, deberán anotar cuantos saltos da su compañero/a.

Esta dinámica también puede hacerse en forma de carrera para un mayor dinamismo. Cada grupo tendrá una hoja de papel, y cuando oigan la palabra “vamos” deberán ir anotando cantidades con múltiplos de 2, por ejemplo: para el número 100 el primer niño anotará un 2, el segundo un 4…y así sucesivamente hasta que lleguen al número 100. Una vez terminado, deberán pasar la hoja de papel al equipo de al lado y éstos deberán representar cada cifra que se haya dado con pequeños saltos, que pueden darse en el sitio o en círculos. A continuación deberás comprobar el nivel de comprensión de los grupos, tanto de aquellos que representen la cifra con saltos como la de aquellos que deban hacerlo con números en silencio sobre el papel.

 

 

Otras alternativas para trabajar el conteo

A través de este tipo de juegos los niños aprenderán a valorar lo importante que es llevar bien una cuenta, y lo mejor es que podrán trabajar el cálculo mental de forma divertida y amena, olvidándose de tácticas negativas como la de contar con los dedos.

Esta dinámica puede llevarse a cabo al aire libre y pueden introducirse aros (hula-hops) para que los niños salten a través del patio o para que digan la “cifra silenciosa a descubrir” con pelotas de colores, globos de agua, combas…lo que se nos ocurra. Lo importante es que los alumnos vayan trabajando el conteo, conforme a su nivel, mientras realizan al tiempo ejercicio físico que, al relajar la mente, permitirá que los niños alcancen un mayor nivel de concentración necesario para aprender a llevar una cuenta en silencio y para practicar el importante y necesario cálculo mental. También puede pintarse sobre el suelo una rayuela o tejo para que los niños que deban marcar la cifra a través del ejercicio lo hagan saltando sobre el dibujo.

 

rayuela-tejo-luche

 

Esta actividad también podría adaptarse a operaciones matemáticas sencillas, como la suma y la resta, o a la resolución de problemas: un grupo se encarga de plantear un problema sencillo y los demás grupos se encargan de darle solución a través de los botes de la pelota o lo que se les ocurra. El grupo que más aciertos tenga y que más ocurrente sea en su respuesta gana.

 

 

Autor: Almudena Orellana

Cofundadora del Proyecto educativo Bosque de Fantasías, escritora creativa y redactora jefe. Leer más

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