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Juegos para desarrollar la motricidad gruesa y fina en niños

Los ejercicios de motricidad son muy importantes para los niños en su etapa de desarrollo. Por eso, en el artículo de hoy, queremos presentaros algunos juegos que se pueden realizar en casa o al aire libre para estimular los músculos y la mente. No son necesarios muchos materiales costosos, pero sí muchas ganas y un poco de imaginación, por lo que para los niños será pan comido.

 

Juegos para estimular la motricidad gruesa

Estos juegos son recomendados para niños desde muy pequeñitos, y con ellos conseguiremos ayudar a los peques a fortalecer los músculos, a adquirir agilidad y a aprender a controlar el cuerpo trabajando la motricidad gruesa. ¿Comenzamos?

 

Este primer juego es ideal para compartir entre hermanos, primos o amigos. Cuantos más participantes, más diversión. Es un juego recomendable para niños de entre 3 y 7 años, aproximadamente, y no se necesita ningún material en concreto para poder jugar, pero sí la participación de un adulto.

 

 

Lo primero que vamos a hacer es trazar una línea imaginaria en un espacio amplio. Se puede jugar en el patio. Los niños van a situarse detrás de la línea y el adulto va a quedarse “durmiendo” al otro lado. Luego, los niños van a acercase lentamente tratando de no hacer ruido hasta llegar al cocodrilo (el adulto). Estando cerca del cocodrilo gritarán: “cuidado con el cocodrilo” y el adulto se levantará para perseguirlos. Quien sea tocado se convertirá también en cocodrilo. Entonces los nuevos cocodrilos se quedarán también durmiendo al otro lado de línea, y se repite así el proceso hasta que todos sean tocados. Ganará el último que no se convierta en cocodrilo en este juego de motricidad gruesa.

 

Este juego se puede realizar con un único participante, pero se pueden sumar más niños. Tampoco vamos a necesitar ningún material, únicamente concentración y fuerza. Vamos a desarrollar principalmente la coordinación del cuerpo y es un juego ideal para niños de entre 3 y 4 años en adelante.

Nos ponemos en posición de cuclillas y saltamos algunas veces. El niño nos tiene que mirar y copiar. Luego ayudamos a que se siente en cuclillas cuidadosamente él también. La flexibilidad de los niños a esta edad favorece este tipo de movimientos. A continuación indicaremos que intente saltar y actuaremos así hasta llegar a la meta, que puede ser marcada con cualquier objeto que tengamos disponible. La idea de este juego y otros juegos similares de motricidad es mantener el equilibrio de manera divertida.

 

Juegos para estimular la motricidad fina también

Estas actividades de motricidad fina contribuirán a que los niños desarrollen pequeños músculos y coordinen movimientos más precisos.

 

Se recomienda realizar este juego con al menos 2 niños, ya que deben crearse dos equipos. El adulto será el responsable de guiarlos. Una vez formados los dos equipos,  colocamos a los niños de un equipo una cinta de color azul, y al otro equipo una cinta roja. A continuación preparamos la misma cantidad de papelitos rojos y azules. También prepararemos dos canastas, que las pondremos a dos metros de distancia de los papelitos. El adulto entonces, al hacer un sonido o decir una palabra, dará la señal para que un niño de cada equipo corra a buscar el papelito que corresponde a su color, lo convierta rápidamente en una pelotita y lo deposite en la canasta.

 

Para la realización de este juego vamos a necesitar una hoja de papel sobre la cual dibujaremos algunas figuras geométricas. Pueden ser triángulos, círculos, cuadrados, etc. A su vez, vamos a disponer de unas cuantas pegatinas.

La idea es que los niños tomen las pegatinas y las vayan pegando cuidadosamente sobre las figuras dibujadas en la hoja. Si no tenemos pegatinas, podemos recortar papelitos de una revista e ir pegándolos, o utilizar lápices de colores para dibujar encima de las líneas que hayamos hecho previamente. ¡Es muy simple!

 

 

Todas estas ideas permitirán trabajar la motricidad gruesa y fina de los más pequeños al mismo tiempo que pasar una buena tarde cargada de diversión. También servirán como estímulos para seguir pensando ideas creativas de juegos con los que acompañar el desarrollo sano y productivo de nuestros niños.