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Beneficios de contar cuentos a los niños cada día

El hábito de contar cuentos a los niños puede ser muy gratificante, tanto para los niños como para los padres. Además, sin duda es un escenario que quedará grabado en la mente de los niños en el futuro como un acto de amor que vivieron durante su infancia, y eso les llevará a repetirlo y a sentirse cerca siempre de la lectura.

Son muchas las razones y los beneficios de contar cuentos a los niños, así que anímate a darles ese regalo todos los días. Y si quieres saber cuáles son esos beneficios, no te pierdas el resto del artículo, donde hablaremos de 5 muy importantes.  ¡Felices cuentos!

 

 

Beneficios de contar cuentos a los más pequeños

 

Dedicar una parte del día a los niños para leer, que no tiene por qué ser mayor de 30 minutos, es dedicarles un tiempo de calidad y quererles mucho. Principalmente, si se está mucho tiempo fuera de casa por asuntos de trabajo, será importante marcarse ese tiempo cada día para poder compartir con los peques. Los niños aprenderán a relacionar la lectura con algo positivo y lo pasarán muy bien con sus padres. ¡Será una práctica y un recuerdo precioso que durará toda la vida!

 

Los valores no se enseñan, se transmiten, por eso es tan difícil hacer que los niños hagan lo que se les diga y no lo que ven. Pero existe una forma sencilla de transmitir valores a los más pequeños, y es precisamente la de contar cuentos y narrar historias antes de dormir o en cualquier otro momento del día. Y es que los cuentos nos permiten transmitir historias a los niños con las que puedan descubrir valores importantes como la amistad, el trabajo en equipo, el compañerismo, etc. Aprovecha los cuentos para saber cómo tus hijos reaccionan ante las actuaciones de los personajes, y oriéntales cuando surjan dudas o preguntas curiosas.

 

A través de la vivencia de los diferentes personajes de un cuento, un niño puede ponerse en contacto con las emociones de cada personaje. Esto le permitirá entender mejor a sus propios compañeros y empatizar con ellos en momentos parecidos a los que refleje el cuento.

 

 

Las historias hacen que broten emociones de rabia, dolor, tristeza, alegría, miedo y/o angustia, por eso, a medida que vayan apareciendo en la narración podrás hacer un alto y preguntar a tus peques cómo se sienten. La intención es que identifiquen la emoción que vaya apareciendo en la lectura y aprendan a llamarla por su nombre.

 

Los cuentos activan la imaginación, principalmente cuando son narrados con suspense, con emoción o con voces especiales. También puedes pararte en algún punto de la historia y preguntarle al niño qué cree que pasará a continuación. El niño rápidamente se adelantará a contarte lo que tiene en mente y de esta forma incentivarás no solo su imaginación, sino también su habilidad de vocabulario y de discurso, así como el poner en claro sus ideas. Además, al terminar la historia, podrá saber si acertó o no el final, lo que siempre le dará un buen componente de emoción a la jornada de lectura.

 

Como ves, los beneficios de contar cuentos a los niños son muchos, así como los de compartir momentos mágicos cada día en compañía de los peques. Su imaginación iniciará un vuelo que les permitirá desarrollar su creatividad, pudiendo seguir la historia o introducir ciertos cambios, y transmitírsela el día de mañana a otros para seguir con la magia.

Así que…¿Te animas a contar un cuento para niños esta noche? ¡Merece muuuuuucho la pena!