El método “Vacachadafa” es una técnica variante del método silábico implementado por docentes, especialmente para niños de prebásica y básica, y resulta muy útil cuando los niños no han dominado el proceso de lectoescritura en su totalidad.
Sus resultados lo han colocado en un lugar de gran popularidad por parte de los docentes, ya que los niños han demostrado dominar la lectura y escritura tras 20 días de haber iniciado el método. Dicho método, además, puede aplicarse sin ningún problema a niños que sean catalogados como de concentración dispersa, con trastornos de aprendizaje o con necesidades educativas especiales.
Cómo se enseña a leer y a escribir usando el método VaCaChaDaFa
Antes de iniciar este método es necesario que el niño/a conozca tanto la grafía como el fonema de las vocales, y así le será más fácil formar sílabas y memorizarlas al verlas. Teniendo claro este paso, se comienza a trabajar por la primera vocal de la siguiente manera:
- Haciendo uso del recurso didáctico que ofrece el método, se toma la cartilla que contiene la letra “A a” y se comienza a señalar con el dedo o lápiz la primera ilustración que aparece en ella.
- Con fuerte tono de voz se lee la primera sílaba, repitiéndola tres veces: “ba, ba, ba”. Seguidamente se pronuncia el diminutivo de la imagen, por ejemplo, si es una ballena se pronuncia la palabra “ballenita”.
- Luego se repite el procedimiento anterior con la siguiente imagen: “ca, ca, ca… casita”, y así sucesivamente hasta terminar la plantilla. Cada plantilla está diseñada para trabajarse cuatro días.
- Al final de cada jornada se debe estimular a los niños para que formen palabras de manera oral utilizando las sílabas de cada plantilla. De esta manera el niño puede apoyarse en las plantillas a la hora de construir sus propias palabras.
Haciendo este ejercicio dos o tres veces al día, completando todas las figuras que trae cada plantilla, el niño comienza a familiarizarse con el método captando su atención rápidamente.
Conoce las ventajas del método VaCaChaDaFa
Veamos ahora algunos beneficios más concretos del método “VaCaChaDaFa” y de cómo puede favorecer el aprendizaje en clase:
- Con este método los más pequeños no solo mejorarán su capacidad de aprender a leer y escribir, sino que también desarrollarán habilidades cognitivas como la atención, la secuenciación, el orden estratégico, el orden mental y la memoria.
- Así mismo, el docente es capaz de dirigir el aprendizaje de cada niño de manera ordenada, desde lo más sencillo (para que puedan comprender), hasta lo más complejo (para que comiencen a razonar).
- Otra de las ventajas es que, con una alianza entre padres y maestros, estas actividades se pueden seguir reforzando en el hogar llevando la misma secuencia de aprendizaje que se lleve en la escuela.
- Finalmente, a través de esta técnica se crea un hábito de estudio, ya que es necesario que este método “Vacachadafa” se efectúe de manera constante y recurrente durante los días recomendados. En este sentido, generar el hábito es la primera tarea que debe impulsar el maestro.
Eso sí, en este punto debemos recordar que cada niño tiene su propio ritmo de aprendizaje, es decir, que algunos son más rápidos y otros más lentos. Si ves que tu hijo en casa capta las lecciones con gran facilidad, no adelantes la lección, porque en la escuela podría aburrirse debido al ritmo más lento de sus compañeros. Si esto llegase a ocurrir, te aconsejamos que le des un giro a sus ratos libres e impulses sus gustos para que practique un deporte o aprenda a tocar un instrumento, entre otras cosas.