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Niños tranquilos y atentos con la técnica de la rana

Que los niños aprendan a controlar sus emociones y a sentirse tranquilos, concentrados y serenos es algo fundamental, y son varias las técnicas que existen y que pueden poner en práctica tanto padres como maestros. Algunas de ellas son especialmente interesantes, como la llamada “Técnica de la rana”, ya que no solo están diseñadas para conseguir que los niños se relajen y que bajen sus niveles de hiperactividad y excitación, sino también para aprender o para lograr manejar otras cosas como la concentración, ideal para conseguir unos buenos hábitos y resultados a la hora de estudiar.

 

¿Quién desarrolló la técnica de la rana?

La técnica de la rana es un método desarrollado por la holandesa Eline Snel  (especialista en mindfulness para niños) y plasmada en su libro “Tranquilos y atentos como una rana”, un libro inspirado por el caso particular y personal de su hija que fue el que le hizo dar con esta técnica. De este modo, la dinámica se centra en métodos avanzados de relajación y de respiración, concentrándose especialmente en la atención para conseguir controlar la ansiedad y el estrés de una mejor manera. Por eso podemos decir que se trata de una técnica de autocontrol infantil de las emociones, vinculada también con el trabajo del sistema respiratorio, cuyo buen funcionamiento es vital para atajar el estrés o la temida ansiedad.

 

¿Cómo se emplea la técnica de la rana en el aula?

 

Beneficios de la técnica de la rana en los niños

Los beneficios de esta técnica son muchos, pero no solo están relacionados con la tranquilidad, y estos son algunos otros:

 

 

La rana es uno de los animales que puede durante más tiempo en estado de relajación o quietud, sin perder de vista todo lo que sucede a su alrededor, y por eso la terapeuta Snel consideró que era uno de los más adecuados para la técnica. Además, la rana, que es muy sabia, una vez que debe moverse lo hace de un salto, lo que le permite regenerar su cuerpo, controlar después su respiración y controlar la ansiedad y conseguir la tranquilidad. ¡Perfecto para los peques que también adoran saltar!