Recompensas, castigos y consecuencias
Es instintivo que gruñamos y castiguemos a veces a nuestros hijos cuando pensamos que se han comportado mal. En ese momento realmente no pensamos y, a menudo, actuamos como nuestros padres actuaron con nosotros, actitud que puede conducir a la frustración al contraponerse a esa idea que muchos padres tienen de no querer hacer las cosas como las hicieron con ellos. Esta frustración que crea en muchas familias el hecho de tener que...