Importantes valores para los niños: La obediencia

¿Qué es la obediencia?

La obediencia es ese valor que nos lleva a escuchar con atención y a cumplir con responsabilidad todas aquellas indicaciones u órdenes que puedan darnos nuestros padres, familiares u otras personas significativas. La obediencia, bien enseñada, es la base de la disciplina y fortalece nuestros vínculos con aquellas personas a quienes se obedece. Desde muy pequeños nos enseñan a obedecer, y esto es positivo puesto que mientras crecemos, necesitamos límites e indicaciones que nos sirvan como guía y nos permitan regular nuestra conducta.

Quizás parezca que el obedecer se ajuste únicamente a los tiempos de la infancia y de la adolescencia, pero en realidad todos en algún punto o área de nuestra vida deberemos y necesitaremos obedecer, y es por ello por lo que la obediencia se trata de un valor tan esencial. Cuando somos adultos debemos obedecer las indicaciones de nuestros doctores, de nuestros jefes en el ámbito laboral, o si somos nuestros propios jefes, quizás también debamos atender y obedecer las sugerencias de nuestros clientes y/o trabajadores.

Obedecer se trata de cumplir con alguna indicación, sin esperar ni pedir nada a cambio y sin necesidad de darle mucho peso al vínculo que tengamos con la persona que nos está dando la orden. Obedecemos a nuestros padres, maestros, jefes, y muchas veces incluso hasta a nuestros hijos. Para que un niño aprenda a obedecer, es necesario que las órdenes o indicaciones sean claras, ya que los niños deben saber lo que se espera de ellos y conocer las razones por las cuales se espera eso de ellos.

Es muy útil que cuando un niño está aprendiendo a obedecer, tendamos a reforzar su comportamiento positivo ya que necesita sentirse motivado y sentir que su esfuerzo está siendo reconocido. De esta forma veremos como poco a poco los niños van aprendiendo, y lo que un día comenzó como una conducta a reforzar, ahora se ha convertido en un hábito, pudiendo trasladar estas experiencias a otras áreas de su vida.

Ahora, esto no quiere decir que debamos enseñar a nuestros niños a obedecer ciegamente cualquier orden que otros les den, porque estaremos criando niños sumisos que en un futuro serán adultos que no serán capaces de hacer valer sus derechos. Obedecer se trata de seguir normas o indicaciones que sabemos serán provechosas para nosotros, porque directa o indirectamente nos proporcionan algún beneficio, o porque nos proporcionan una guía o un apoyo durante nuestro proceso de aprendizaje.

Autor: Jesús Falcón

Cofundador del Proyecto educativo Bosque de Fantasías, programador y desarrollador por excelencia, dedicado al mundo educativo y a su evolución.

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