Todo lo que debes saber en torno a la crianza respetuosa en 4 puntos

La crianza respetuosa a veces se confunde con la crianza con apego y, sí, coinciden en algunos objetivos, pero mientras que la primera se centra en el respeto al niño como persona que es, la segunda está basada en el contacto físico y emocional como imprescindible al menos en los primeros años de vida.

Aquí vamos a definir la crianza respetuosa, una forma de educar que genera conflictos entre los defensores y los detractores. La verdad es que cuesta entender que si criamos a nuestros hijos con amor e inquietudes, por supuesto, que intentamos resolver, sea cual sea el método que sigamos haya gente que lo critique. Quiero decir que hay mucha gente que no se preocupa por sus hijos, y tú, que estás leyendo esto evidentemente sí lo haces. Y ahí voy, tanto si estás de acuerdo con las premisas de la crianza respetuosa, o cualquier otra,  como si no, pues deberíamos respetar, ¿no?

Al fin y al cabo no nacemos sabiendo ser padres y el poner empeño y ganas en hacerlo lo mejor posible ya es mucho. Leer sobre el tema, compartir experiencias y cambiar hábitos si creemos que algo puede funcionar mejor, es lo que realmente hace que uno sea padre o madre. Cada familia y cada niño son diferentes y únicos y no todo vale para todo el mundo, así que sin prejuicios, veamos qué defiende la crianza respetuosa y qué nos puede resultar útil de ella:

 

Claves para entender mejor el concepto de crianza respetuosa

  1. Empatía por encima de todo. Ponernos en el lugar del niño para poder sentir lo que él siente. Bajarnos a su altura e intentar acercarnos a su percepción de la vida en cada momento, sin minimizar sus sentimientos sólo porque sea un niño. Aprender a reconocer y valorar sus peticiones para distinguir si son reales o esconden otra necesidad, quizás de atención o cansancio.
  1. Decir que no de formas alternativas, como por ejemplo hablando en positivo: en vez de no le pegues al perro, podemos decir al perro se le hacen caricias, por ejemplo. Evitar ambientes de peligro en los que tengamos que controlar en exceso al niño es sin duda una decisión acertada: en vez de llevar al niño al salón de tus padres que es una exposición de cristalería y figuritas delicadas, opta por quedar con ellos en el parque directamente y todos más relajados.
  1. Tratarlo de tú a tú. Hablamos de una relación horizontal en la cual todos somos personas, unas más pequeñas, otras más grandes. Pero todas merecedoras del mismo respeto. No le hagas a tu hijo lo que no te gustaría que te hicieran a ti. No le ridiculices, ni le grites, ni le subestimes. Escúchale, sé paciente y envuélvele de cariño. Seguro que entenderá mejor lo que le tengas que decir si hay una sonrisa y un abrazo de por medio.
  1. Disciplina razonada. Las normas existen y los límites también, pero con cierta flexibilidad. El día a día nunca es igual y dentro de la rutina hay espacio para las excepciones. Si un día el niño quiere quedarse una rato más en la bañera, seguro que no nos trastornan tanto 10 minutos de retraso a cambio de un poco más de juego y diversión. Razonar siempre si lo que piden se les puede dar, a lo mejor modificando algún punto. Ceder si no hay peligro o problema no es malo, pero siempre razonando el porqué.

Se trata, en definitiva, de criar de forma mucho más atenta a la demanda del niño, a sus opiniones, inquietudes y necesidades, evitando el conflicto, sustituyéndolo siempre que se pueda por amor y empatía. Y dando ejemplo, por supuesto. Como queremos que sean, tenemos que ser…

¿Qué te ha parecido el método de la crianza respetuosa? ¡Cuéntanos!

Autor: Carolina Cuello

Escribo desde siempre, por trabajo y por placer. Creo que la palabra escrita puede cambiar el interior de las personas y es en lo que pienso cuando redacto un nuevo artículo. Más información

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1 Comentario

  1. He leido su articulo y me gustaria dar mi opinion. Primero me ha sorprendido la frase de hay padres que no se preocupan por sus hijos y que quien lee el articulo si lo hace.
    Segundo punto q me ha sorprendido es q si el niño no tiene libertad para destrozar la casa donde va directamente no ir para q no haya q decirle no al niño.

    Y en tercer lugar q la palabra NO este betada.

    Realmente creen que esto es asi correcto?

    El conflicto, el no y la frustracion q conlleva no hacer absolutamente todo lo que te pasa por la cabeza porque en el mundo no solo esta tu voluntad sino q hay otras voluntades q no coinciden con la tuya es parte de la vida. Y tarde o temprano se daran de cara cn ella. Quizas es mejor no dibujar la vida de esa manera ta irreal y dar herramientas acords con la edad de cada niño para afrontarla.
    Un saludo

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